La digitalización mundial es un hecho innegable y se está haciendo cada vez más patente en los últimos años. Estamos ante la cuarta revolución industrial. Esto supone, entre otras cosas, que tenemos que trabajar cada vez con más datos, que requieren técnicas más complejas para analizarlos y con esto surge la necesidad de mejorar como se muestra la información al usuario y cómo es su interacción con los productos digitales. Cada día hay más oferta de software y por tanto ésta debe ser más competitiva. Actualmente, una interacción clara, concisa y agradable para el usuario a la hora de consumir software es un requisito indispensable.
Aquí es donde entran en juego los conceptos UX y UI. Ahora bien, ¿Qué significan estas siglas?
UX son las de User Experience y UI de User Interface. Pueden parecer conceptos parecidos, pero no lo son. Se definen más bien como conceptos complementarios.
El UX se centra en la optimización y en el equilibrio de cada elemento y componente presente en la interfaz. La optimización en UX se entiende como el proceso de creación y distribución de contenido para que el uso del producto sea lo más fácil e intuitivo posible.
Aquí entran en juego la estrategia, el conocimiento de las necesidades del usuario y la creación de escenarios para simular el uso del producto. Para esto es necesario el análisis, la organización y la estructura de los datos.
El UI, por otro lado, se centra en la apariencia y en la interactividad del producto. Esto requiere creatividad e innovación.
La combinación de ambos conceptos otorga a un producto digital un diseño a medida para el usuario.
En la visualización de datos es fundamental definir el contexto. Para ello, nos podemos hacer las siguientes preguntas explicativas:
- ¿Cuál es el target de usuarios?
- ¿Cuál es el objetivo?
- ¿Qué expectativa tiene el usuario?
- ¿Cuál es la forma más simple y clara de transmitir la información?
Tener una definición sólida de todos estos aspectos es primordial para ofrecer una buena solución visual. Si la visualización no cubre la necesidad del usuario entonces no se está agregando ningún valor y sería necesario redefinir el contexto.
La experiencia de usuario está influenciada por las tendencias del momento, así como por las experiencias pasadas, por lo que hay que encontrar un equilibrio entre ambas ideas.
Existen soluciones extendidas para la visualización de datos, como pueden ser:
- Tablas de datos: la solución por excelencia para visualizar datos. Permite añadir muchas funcionalidades como pueden ser los filtros, mostrar/ocultar columnas, ordenar la información…
- Gráficos: es la solución más visual y suele proporcionar mucho valor añadido al contexto, ya que ofrece tantas opciones que es fácil encontrar el tipo de gráfico que más se adapte a la necesidad principal. Existen multitud de gráficos: de barras, de línea, de área, mapas…
- Tarjetas de información: resumen una información específica, Son visualmente simples pero potentes.
- Dashboard: permite al usuario acceder de forma sencilla a la información más relevante. Combina las soluciones anteriores para que se pueda acceder a la información de forma rápida y de un solo vistazo.
En el trabajo diario, somos extremadamente minuciosos en la búsqueda de unas UX y UI apropiadas y personalizadas para cada cliente o cada proyecto. Sabemos de primera mano la aportación de valor que supone el trabajo en detalle de estos conceptos. Por eso es esencial saber transmitir los datos obtenidos y ofrecer las mejores herramientas para explotar todo su potencial. La combinación de una interfaz gráfica con los conocimientos UX/UI brindan al mundo la posibilidad de un software cada vez más depurado y fácil de manejar.
